Arquitectura, Interiorismo

Lambrines vs pintura, ¿cuál es tu mejor opción?

Al momento de construir o remodelar, cada detalle suma, los muros son particularmente importantes pues acaparan gran parte de la vista en el espacio (pueden complementar o malograr una decoración completa). Aunque la elección más habitual es utilizar sólo pintura en ellos, hoy en día hay cada vez más opciones de acabados accesibles para todo tipo de condiciones, espacios y presupuestos.

Uno de los que más popularidad ha adquirido últimamente son los lambrines WPC; sin embargo, si aún no los has utilizado, puede que tengas preguntas sobre su conveniencia, peso, costo, etcétera. El día de hoy resolveremos todas tus dudas y haremos un comparativo para que sepas al 100% qué opción y en qué circunstancias te conviene más.

¿Qué características te ofrece cada uno?

La pintura es un recubrimiento ligero, normalmente con base acrílica, que brinda un poco de protección al muro. Tienes 3 acabados diferentes (mate, satinado y brillante) y, además de una gran variedad de colores, puede ofrecer otras características que protejan al muro de algunos daños menores. Sin embargo, a pesar de su versatilidad, al elegirla también se debe considerar previamente si se requiere una que soporte la intemperie. Prácticamente, cada variedad ofrece opciones distintas, dependiendo de si se utilizará para interiores o si se requiere alguna otra característica especial por las condiciones del espacio.

Los lambrines WPC son una alternativa que combina un porcentaje de madera natural con resina plástica, para ofrecer un acabado tipo madera con aspecto más natural, pero sin las desventajas de este material. Son más ligeros que la madera real y, también, más resistentes a los cambios de temperatura, la intemperie y distintos elementos ambientales. Su variedad de colores es más limitada ya que imitan, lo más posible, las tonalidades de la madera natural; sin embargo, aportan un toque llamativo  y natural sin robar el protagonismo al resto del diseño. Al igual que ocurre con la pintura, es importante elegir previamente modelos adecuados para interior o exterior, dependiendo el proyecto.

Ambas alternativas, tanto los lambrines como la pintura, están contraindicadas sobre muros que presenten algún daño o deterioro importante: como humedad, salitre, grietas estructurales, etc.

Instalación y durabilidad

La pintura es una de las opciones más comunes de acabado debido a su costo y lo fácil que es colocarla. La instalación de lambrines WPC requiere de más herramientas, aunque la mayoría de ellas no son de uso especializado, por lo que es probable que ya cuentes con ellas en casa (taladro, pijas, nivel, etcétera). Con la pintura, es necesaria una mayor preparación del espacio y, si se requiere más de una capa, tiempo de secado. A pesar de ello, sigue siendo una alternativa más práctica, pero sólo si hablamos de la inmediatez del proyecto. Recuerda que siempre es importante considerar el largo plazo para evaluar qué inversión es más redituable.

La pintura, principalmente en áreas donde está más expuesta a la intemperie o tránsito constante, requiere mayor mantenimiento. También es difícil de limpiar, en comparación con alternativas de recubrimiento como los lambrines WPC, que por su material son poco permeables a la suciedad. También, su tiempo de vida útil es más corto, pues tiende a resquebrajarse, deslavarse o incluso votarse de las paredes en un menor tiempo, por lo que a la larga podría representar un gasto mayor.

¿Qué se adapta mejor al diseño, la pintura o los lambrines WPC?

Este punto depende completamente del gusto personal. Si bien es cierto que con la pintura puedes elegir mayor variedad de colores, la mayoría de los efectos más llamativos requeiren de un tiempo mayor de colocación o de técnicas y herramientas especiales para conseguir el acabado deseado. Aunque al final, las opciones que ofrece son más coloridas y vibrantes.

Los lambrines WPC tienen una gama menos amplia de colores en comparación, pero por lo mismo son perfectos para áreas comunes, espacios públicos y /o compartidos. El toque neutral pero elegante y llamativo que aportan, son la razón por la que hoy en día son tan utilizados en espacios comerciales, empresariales o incluso por inmobiliarias. Le dan un acento único al espacio, reflejando personalidad y elegancia cuando se utilizan solos o ayuda a hacer destacar el estilo del espacio o el mobiliario.

Ahora que sabes las fortalezas y contrariedades de cada alternativa, puedes elegir la que se adapte más a tus necesidades. Mejor aún, puedes implementarlas en conjunto para tus próximos proyectos, sacando el mejor provecho de cada una al colocarlas estratégicamente para obtener el mejor diseño.

Si sientes que aún te falta inspiración para comenzar, recuerda que puedes ver más ejemplos de cómo se vería tu espacio en nuestras redes sociales (FB, IG y YouTube). Y si ya te decidiste a utilizar lambrines WPC, asegúrate que sean de la mejor calidad cotizándolos en Ranka Espacios, sólo haz click aquí.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.